viernes, 27 de febrero de 2009

Parlar-te de llavors

(para Joan Manuel)


HARRY ALMELA

 

Quiero comenzar estas líneas recordando tus remotos días de Els setze jutges, de tu encierro voluntario en Montserrat, junto a otros incondicionales, en protesta por el derecho a la vida, aun cuando los condenados a muerte fuesen de la ETA; de lo mucho que te costó renovar tu pasaporte en su momento, así como de los incidentes cuando tu viaje a Chile en medio del terror de la dictadura militar. Quisiera recordarte, aunque de pronto esté de más, lo que ha costado política, social y culturalmente a España y a la Catalunya de las cuatro barras, superar el duro infierno que se inicia el 18 de julio de 1936 y que culmina, por la gracia de Dios, el 20 de noviembre de 1975, manu militari de por medio. En esos remotos años, mozo e inocente yo, comencé a seguir paso a paso tu destino, que sentía urticariamente ligado a toda nuestra generación. Los amigos me recortaban tus entrevistas y tus fotos. Recuerdo unas declaraciones en Buenos Aires, deliciosas, en donde llamabas a Mercedes Sosa una niña del Opus Dei. Coño (me dije). Este tipo anda en una vaina.

La primera vez que te oí, fue cantando Señora. Luego me puse a escarbar en discotiendas pueblerinas, hasta encontrar un 45 rpm de Zafiro, muy hilarante, pues de un lado estaba Penélope y por el otro una versión en castellano, más o menos pasable, de Temp de pluja. Ahora, tus CD’s se compran por kilos en El Corte Inglés, como se afana en anunciar tu página oficial. Luego vi ascender y declinar tu astro, como debe ser por el paso de los años. Más allá de los discos a Machado y Hernández (toda una proeza en esos tiempos políticos de España, junto al Cançons tradicionals con aquella portada que recuerda a Els segadors, por supuesto, y arreglos de Salvador Gratacòs), creo que MediterráneoEn tránsito y fragmentos gruesos de tu disco 1978 (aquella canción brechtiana Por las paredes, ¡Dios mío, que hermosura!) y Utopía van a quedar en el imaginario colectivo de estos años. Y desde el punto de vista humano, siempre me encantó tu acercamiento con Raúl Gómez Jattin, poeta entrañable que siempre está presente en mis lecturas.

Comencé a fastidiarme con Tarres, aunque el disco en catalán dedicado a los últimos años de la resistencia musical a Franco, Banda sonora d'un temps, d'un país, me sigue pareciendo intachable. Cuando viví en Barcelona, y paseaba detenidamente por las angostas calles del Barri Gòtic, entendí que tú y tus canciones no podían haber nacido en otra parte sino allí, al pie del Montjuic, en Carré del Poeta Cavanyes.

He visto declinar tu astro, te decía, y me rompe el corazón percibirte haciendo morisquetas entre bambalinas sobre un fofo cuadrilátero, como un Mohammed Alí cualquiera -otro santo de mi más absoluta devoción generacional- en sus últimas presentaciones. Ya hace cuarenta años que tienes veinte, y es mucho eso, sobre todo si ahora ves al mundo desde tu muelle casa en Camprodon, Girona.

Entiendo que desde hace algún tiempo te dedicas tangencialmente al negocio de la vinatería y por eso alabaste el vino chileno, horas antes de subir al escenario de un dudoso Festival de Viña del Mar (¡mira por dónde!) que no detuvo su ritmo chapucero de uh, pavo real.. uh, pavo real ni cuando los años de Pinochet. Vi algunos fragmentos de esa presentación, a través de un canal por cable, y en verdad me puse a llorar, contemplando de cerca cómo la vana gloria se resiste al declive que marca el ineluctable paso del tiempo, como cuando una prima donnaflaca, fané y descangañada, sabía mover sus caderas en cualquier hermoso salón de la belle époque. No lo tomes a mal, Joan Manuel, lejos de mí ser ofensivo, pero esa presentación tuya en Viña del Mar me hizo recordar a la Carmeta, paseando por Paral.lel, amb un gos vell, ple de sarna, l'abric menjat per les arnes, la boca vermella i una flor a l'orella. En verdad, me puse a llorar. Y fue cuando entonces quiseparlar-te de llavors.

Porque el llanto se convirtió en algo parecido a la rabia. Declaraste, sin sonreír siquiera, que“descalificar al gobierno del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, no es el camino correcto, por cuanto el gobernante llegó al poder mediante las urnas y las reformas las hace a través del mismo mecanismo”. "ha planteado unas elecciones limpias y abiertas y las ha ganado", “la oposición venezolana tiene que aprender. La gente decide según su realidad y no es tonta". Me puse a hacer un ejercicio de permutas, como quien arma unas quinielas, y me salieron varias versiones más o menos sugestivas. Voy por peteneras:

Descalificar al gobierno del presidente de Zimbawe, Roger Mugabe, no es el camino correcto, por cuanto el gobernante llegó al poder mediante las urnas y las reformas las hace a través del mismo mecanismo”, "ha planteado unas elecciones limpias y abiertas y las ha ganado", “la oposición de Zimbawe tiene que aprender. La gente decide según su realidad y no es tonta".

Descalificar al gobierno del presidente de Belarús, Alexander Lukashenko, no es el camino correcto, por cuanto el gobernante llegó al poder mediante las urnas y las reformas las hace a través del mismo mecanismo”, "ha planteado unas elecciones limpias y abiertas y las ha ganado", “la oposición de Belarus tiene que aprender. La gente decide según su realidad y no es tonta".

Y esta variante, que me quedó preciosa:

Descalificar al gobierno del presidente de Alemania, Adolfo Hitler, no es el camino correcto, por cuanto el gobernante llegó al poder mediante las urnas y las reformas las hace a través del mismo mecanismo”, "ha planteado unas elecciones limpias y abiertas y las ha ganado", “la oposición social-demócrata y el Partido Comunista de Alemania tiene que aprender. La gente decide según su realidad y no es tonta".

Porque, claro, visto desde la izquierda europea, con sus trapos de lujo y su pobre osamenta, sus defensas gastadas, sus gastos de defensa, con su corno francés y su academia sueca, como dice esa desdicha literaria que se hace llamar Mario Benedetti (un disco lamentable, por cierto, hecho para quedar bien con los comisarios), desde la izquierda europea, decía, elecciones es igual a democracia. Aún cuando las organice un ex militar que actúa como un militar, se viste como un militar y le habla al mundo como un militar. Pues no, Joan Manuel, fíjate que no.
No voy a hablarte de las cotidianas y ya demasiado comunes violaciones a los derechos humanos. No te hablaré de las inconsistencias del Registro Electoral, ni de las operaciones de cedulación que las maneja sólo el gobierno, sin consentir que la oposición participe en la fiscalización del procedimiento, lo que permite otorgar cédulas de identidad a diestra y siniestra, único documento válido para ejercer el derecho al voto. No te hablaré siquiera del ventajismo oficial en la campaña, cuando hasta en los pasillos del Metro de Caracas, cual campo de concentración, oías los jingles de la campaña por el SÍ a la reforma. Estas cosas son absolutamente impensables en una campaña para reelegir a Zapatero o a Aznar. ¿O eso puede suceder en la España de charanga y pandereta, devota de Frascuelo y de María, de espíritu burlón, y de alma inquieta?
Seré puntual. Esa reforma ya se había votado en 2007, y nuestra Constitución (ésa quenos ampara) dice claramente que algo ya votado en una reforma no puede volver a votarse durante el mismo período constitucional. Digamos que en democracia, uno puede apelar a la Justicia. Pero nuestra Justicia (ésa que nos defiende, mientras los pajaritos cantan y las nubes se levantan) está en manos de unos locos con carné en el Tribunal Supremo de Justicia, cuyos miembros, al momento de iniciar el Año Judicial, no dudan en gritar, mientras saltan, ¡uh, ah, Chávez no se va! Mientras eso sucede, los líderes de esta revolución bonita se encaraman en Hummer y andan rodeados de protocolo, comitiva y seguridad, viajan de incógnito en autos blindados a sembrar calumnias, a mentir con naturalidad, a colgar en las escuelas su retrato, mientras el parte de guerra semanal anuncia entre 40 y 60 muertos por el hampa, sólo en Caracas. O apoyan gobiernos como el de Irán, para quienes Israel debe desaparecer del mapa. El gobierno en su momento, apoyó a Hammas desde una mezquita en acto público, y cuando atacaron a la sinagoga de Maripérez, declararon que ellos no apoyan actos violentos. No les cuesta mucho engalanar la boñiga, para queadmirado, el mundo diga ¡qué lindo caga el señor! Por cierto, acabo de leer que un miembro de la directiva de la Orquesta Sinfónica Gran Mariscal de Ayacucho (subsidiada por el gobierno, la misma que creó José Antonio Abreu, recientemente galardonado por el hijo del Borbón) notificó telefónicamente a los productores de El violinista sobre el tejado, que se presentará a partir del próximo sábado en el Aula Magna del Universidad Central de Venezuela (donde por cierto, te vi por primera vez en persona), pues es una obra de contenido judío.
Por esto, y muchas deficiencias más, que en un anexo se especifican, te pido, por favor, poniéndome en tono Borbón en su versión más chambona y retrechera: ¿por qué no te callas? Es preferible hacer silencio antes de opinar acerca de una realidad que queda muy lejos de Algeciras y Estambul, desde done has venido a pintarnos de azul muy oscuro el horizonte de nuestra coreografía espiritual. Callarse, además, garantiza cierta neutralidad, muy a tono con tu posible visita a Venezuela este año. La pela es la pela, allá y en cualquier parte del universo, Joan Manuel. ¿Estarás pensando en eso, luego de saber lo que le hicieron a Alejandro Sanz por hablar mal de este gobierno? Otra cosa que sugiero, si me es permitido, es que pases unos diítas por acá. Como sé que te privan más los barrios que el centro de la ciudad, te sugiero algo así como Los Magallanes de Catia, La Bombilla de Petare o el 23 de Enero. Son lugares excelentes para darse una idea más o menos aproximada de lo que significa el vocablo democracia en este país y en estos años del siglo XXI.
Por ahora (para citar una muy conocida frase de quien ahora defiendes con pasión y con ese ahínco tan mediterráneo y chambergo), en verdad, Joan Manuel, no sé qué hacer con tus discos (los tengo absolutamente todos), los libros acerca de ti (los tengo absolutamente todos). No sé qué hacer con las foticos tuyas, la que nos tomamos en Maracay con el pana Henry Martínez y la que tengo de tu casa en Poble Sec. No sé qué hacer con esa acumulación de olores, de sensaciones, viajes y amores que llegaron a mi vida con esta cajita feliz. Quizás los ponga un rato en el congelador de mi alma, mientras terminen de pasar estos tiempos goyescos. Hace años lo hice con Silvio y con toda la Trova, y te juro que he sobrevivido. Ya tengo algo de experiencia en eso de pelarme el alma como si fuera una cebolla. De eso también se trata esta historia. Es necesario aprender a hacer aguas.
Te he visto desplazarte desde la marginalidad en que se había convertido la cultura de tu patria chica, según la óptica del franquismo, hasta el centro mismo del escenario. Y deseo que no pierdas de vista el estilo. Estilo, un poco de estilo para acometer cualquier acto, es lo que pide Ben Gazzara al comienzo de aquella memorable película que se llama Cuentos de la locura corriente.
Hay que tener estilo para hacer mutis, Joan Manuel.
No nos defraudes.
Harry Almela
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jueves, 19 de febrero de 2009

Y ahora...¿Qué vendrá de "Allá" para "Acá" 
Emilio Nouel

Jueves, 19 de febrero de 2009

Muchos nos estamos haciendo esta pregunta. Como dice el pueblo, al picado de culebra, cuando ve bejuco, se le erizan los pelos.

Escríbanlo: No pasarán muchas semanas antes de que el gobierno distraiga a las fuerzas democráticas con un nuevo asunto que les consuma tiempo y energías. Ésa es su línea de acción, lo indica el manual: no dar respiro, ni descanso al contrario, para mantenerlo ocupado y desgastarlo en todo momento.

De modo que la intención de acosar y cercar a los opositores seguirá su curso, a veces de forma escandalosa y otras imperceptible; podrá bajar la intensidad un tiempo, pero luego subirá, es la naturaleza de quienes nos desgobiernan, es su sino.

Entonces ¿Cual será la próxima distracción, el siguiente señuelo? ¿Cuál la nueva sorpresa que nos tiene guardada el señor Presidente? ¡Vaya usted a saber¡ Mientras tanto, ya sabemos que la campaña electoral de 2012 está abierta, y que voces gubernamentales están llamando al diálogo con la oposición. ¿…..? Por otro lado, en pocos meses tendremos las elecciones de concejales, y hay que ponerse a cargar las pilas, no vaya a ser que volvamos a reaccionar tarde, lo que sería imperdonable.

Sea lo que sea, con seguridad, veremos salivando a los medios, incluso los de la oposición. Le dedicarán horas de transmisión y ríos de tinta a la nueva jugada política que vendrá de Miraflores.

Observaremos a políticos y analistas devanarse los sesos tratando de escudriñar por dónde vienen los tiros o qué maniobra está detrás de qué cosa, y serán, obviamente, requeridos por "El ciudadano", "La profesora" o Miguel Ángel, para que les respondan acerca de lo que puedan ser las razones profundas de tal o cual movimiento gubernamental.

¡Ojalá, Dios, no nos dediquemos únicamente a dar respuesta a las iniciativas de Chávez, en lugar de hablar, con acciones propias, a la mayoría que está esperando una oferta política distinta¡ ¡Ojalá tampoco nos consumamos en rencillas estériles o nos enredemos en pequeñeces¡ ¿No vale la pena entonces ir pensando desde ya en el próximo capítulo de esta inacabable y trágica telenovela que vivimos? ¿Están los líderes de la oposición haciendo el esfuerzo de convergencia y entendimiento que esta grave circunstancia demanda? Son apenas 5 meses los que quedan para la elección de concejales, y si le restamos el tiempo de campaña, el tiempo se reduce a 3, o sea, la tenemos encima.

Ciertamente, estamos agotados, obstinados, de tanta elección. No es descabellado pensar que algunos abstencionistas tengan en el agotamiento la causa de su conducta pasiva.

¿Se ha tomado conciencia verdadera y sincera de la necesidad imperiosa de la unidad de las corrientes democráticas de cara a los eventos comiciales que se avecinan? Somos 5.200.000, repito, 5.200.000 almas dispuestas a conquistar una democracia plural, dialogante y de respeto del otro. Somos 5.200.000 ciudadanos que aspiramos a un amplio bienestar económico y social de toda la familia venezolana. En fin, somos una mitad del país votante que desea vivir en paz, con gobernantes de verdad, decentes, que les duelan los problemas y actúen con responsabilidad y competencia.

No comprendemos, por tanto, el achicopalamiento que ha asaltado a algunos. No nos lo podemos permitir, nuestro futuro no lo consiente.

No hay tampoco lugar ni tiempo para la búsqueda de culpables, ni para achacar a otros nuestras propias faltas. Pongamos el foco y nuestros esfuerzos en lo fundamental, en aquello que nos permitirá salir lo más pronto posible de esta pesadilla interminable. No nos distraigamos con temas menores (captahuellas o conexiones wi fi). El gobierno sabe el rechazo que hay de estas irregularidades y lo utiliza en su guerra sucia, haciendo correr por Internet y otros medios, cada vez que hay una elección, bolas de toda naturaleza para estimular la abstención y cabrearnos.

De allí que lo sustancial sea lograr el respaldo mayoritario de la población, ése es nuestro Norte, y eso sólo se logra –lo reiteramos por enésima vez- con una propuesta política poderosa y atractiva que vaya al encuentro de las mayorías. Ésa es la única forma de derrotar el ventajismo corrompido del gobierno, y la alcahuetería y obsecuencia de los que dirigen las demás instituciones del Estado, en especial, la que se encarga de lo electoral, el CNE.

Con una mayoría determinante, que aún no la tenemos, no habrá trampa que valga, ni doblecedulados, ni tintas no indelebles. Es verdad, perdimos el último referéndum, no avanzamos lo que hubiéramos querido, pero ahí vamos, con un bloque de roca inconmovible que no creo que vaya a bajar de 45 % SI hacemos bien los deberes. 

¿Es inalcanzable ser mayoría en la Asamblea Nacional el próximo año? 

En este camino que será exitoso, debemos estar alertas, desde ya, para las nuevas distracciones que vendrán de "allá" para "acá". Apartemos el desánimo y la irracionalidad. De este lado, estoy convencido, hay más inteligencia, cordura y, sobre todo, más juventud.

lunes, 2 de febrero de 2009

LA BESTIA FASCISTA ANDA SUELTA

 

Hoy de nuevo, como 35 años atrás, siento la misma indignación, rabia y dolor, que me produjo ver, por vez primera y de la manera más descarnada, testimonios, fotografías y objetos sobre los horrores de la barbarie autoritaria y antisemita durante la Segunda Guerra Mundial. 

   Hasta entonces, por las lecturas y algunas películas, había podido enterarme o ver, superficialmente, episodios aterradores del exterminio nazi de judíos, gitanos y luchadores democráticos, hechos bochornosos que repudiaba aun desconociendo la magnitud real que  ellos tuvieron.  

  Al entrar en aquel Museo de la Resistencia en Francia, no sospechaba que lo ya conocido por mí, palidecería frente a aquella memoria histórica gráfica expuesta allí.  

  Sala tras sala recorrida, iba aumentando en nosotros la indignación, pero también se nos iba haciendo un nudo en la garganta que muy pronto nos enmudecería. Me acompañaban 2 jóvenes venezolanos recién graduados de bachiller; uno de ellos, por cierto, fue hasta hace poco embajador de Venezuela en Washington; yo apenas tenía unos meses de graduado de abogado.

   Nos mirábamos las caras, mezcla de turbación y asombro, sin encontrar palabras para expresar nuestro espanto ante tanto horror junto. Fue de tal manera impactante la experiencia, que a la salida, nos sentamos en un banco, y no pudimos pronunciar palabra alguna durante varios minutos.

  ¿Cómo era posible que seres humanos iguales a uno hubieran cometido tales desmanes? ¿Cómo se explicaba tal pisoteo de la dignidad humana? ¿Había ocurrido eso realmente o era producto de la exageración?

   Sin embargo, era la pura verdad.

   Al ver, hoy, que en mi país la violencia y la intolerancia estimulada desde las alturas del gobierno, conducen a hechos que no hacen sino evocar aquellas atrocidades, no podemos menos que sentirnos profundamente decepcionados.

  Hace unos días fue la Nunciatura Apostólica el objetivo de los delincuentes metidos a políticos. La semana pasada la profanación de una sinagoga en Caracas. Personalidades no afectas al gobierno, dirigentes políticos, universitarios, medios de comunicación social y periodistas, han sido el blanco de ataques terroristas diversos por parte de bandas de hampones que son utilizados por la oligarquía gubernamental para atemorizar a los opositores.

   La bestia fascista la han soltado y anda hambrienta en busca de víctimas inocentes: los que se niegan a arrodillarse frente al déspota y sus designios delirantes. La bestia se disfraza de revolucionaria, de bolivariana, de socialista. Pero no es más que la barbarie, el retroceso y la podredumbre.

  Como venezolano educado para la libertad y la democracia, para la tolerancia, la solidaridad, el respeto de los valores universales y la dignidad humana, los hechos de violencia y fanatismo sucedidos estos días me hacen sentir hondamente avergonzado e indignado. Lamento decir que cosas como éstas, me temía. Con los desequilibrados que nos gobiernan es posible cualquier perversidad. 

   Salirle al paso a estas barbaridades es un deber moral y político de todos los venezolanos decentes y pacíficos. Nuestra lucha por recuperar un ambiente civilizado para la política y para la solución de los problemas sociales es dura y larga. No debemos olvidar nunca este objetivo, es legítimo y necesario.

   No permitamos que la bestia totalitaria tome nuestras vidas y el país, para destruirlos. 

 

EMILIO NOUEL V.

domingo, 1 de febrero de 2009

 LA DERROTA DEL TIRANO, MÁS TEMPRANO QUE TARDE, OCURRIRÁ 

      

 

 

                                       “Después de dormir diez horas y darse tres baños con baños

                                       salfumán y albahaca, volverá por la picada; como no pudo

                                      por la puerta, tratará de entrar furtivamente por la ventana 

                                     con otro disfraz,  como el lobo del cuento de la Caperucita

                                     Roja. Por ello, todos con los ojos bien abiertos, Ha perdido

                                     su invencibilidad, no el poder”.

 

                                                                                           Nicolás Pérez

 

 

La conducta que ha exhibido el caporal de Miraflores en estos días pre-referéndum, es una prueba más de su camaleonismo, se adapta de inmediato  a las circunstancias cuando no las tiene todas consigo. Si es necesario disfrazarse de Caperucita, lo hace sin ningún miramiento, ni pudor.

     Si alcanzar su objetivo significa desdecirse hoy de lo que dijo ayer, eso lo tiene sin cuidado; maromero al fin, dará los giros más espectaculares sin que lo frene escrúpulo alguno, carece de ellos.

    En la búsqueda de su objeto deseado, mano de seda y manirroto hacia fuera del país; puertas adentro, violaciones a los derechos humanos y utilización de bandas paramilitares terroristas y delincuentes, todo para disuadir a la población  a que no vote.

     En su desvarío no le importa mimetizarse con quien sea o aparentar lo contrario a lo que es; miente y manipula de manera obscena en eventos nacionales e internacionales. En función de lo que le quita el sueño,  no hay recurso, por muy ilícito que sea, al que no eche mano, y si para ello es menester corromper a sus seguidores y tomar los dineros públicos, lo hace sin respetar leyes y sin  remordimientos.

    Así, con toda su caradura, trata de camuflar su proyecto de reelección indefinida con una supuesta ampliación de los derechos de los venezolanos. De allí los corricorres que llevaron a la redacción de un engañoso e ininteligible texto para la enmienda constitucional que propone.  

   ¿Por qué lo hace así?

    Pues, le preocupa que la gente dude de su condición democrática, que le vean la verdadera intención, aunque en gran parte de los venezolanos tal duda ya no existe. Sabe que el pueblo venezolano rechaza mayoritariamente las tiranías y los gobernantes eternos, y aspira a la alternabilidad en el gobierno.  Teme que si dice las cosas por su nombre, el rechazo vaya a ser gigantesco, como es probable que ocurra.

   Esta semana pasada, lo vimos decir: “Le doy luz verde al pueblo, para que haga conmigo lo que quiera”, pero a renglón seguido, agrega: “Ya saben, sin mi, vendrá la guerra, el caos, los que se oponen a mi son antipatriotas, yo soy la Patria”. Así, el mandón enloquecido, despojado de todo rubor, pretende, como dice Humberto García Larralde,  confiscarnos también la Patria.

   Que no se engañe nadie, este “iluminado” no va a cejar en su empeño de instaurar una tiranía, y utilizará todas las artimañas legales o no, para hacerlo.

   Se burló del veredicto democrático del 2D de 2007, tiene acosados con bandas fascistas a los gobernantes electos el 23N pasado, auspicia y protege el vandalismo y el antisemitismo, y pisotea las normas constitucionales y legales ante la mirada complaciente de los jueces de la ignominia, así va a ser hasta que se vaya en el año 2012.

   Tiene todos los recursos institucionales y financieros del poder a su disposición. Pero está consciente, en su delirio, que puede ser derrotado nuevamente, porque no es invencible, el pueblo venezolano lo sabe.

  Es muy probable que lo derrotemos en febrero. En cualquier caso, en el 2012, ténganlo por seguro.

 

EMILIO NOUEL V.