Cómo no subrayar el caradurismo de los jerarcas chavistas cuando, frente a las medidas
soberanas que, gusten o no, adoptó el gobierno norteamericano contra
funcionarios venezolanos que considera violadores de los derechos humanos, lo acusan
de “fomentar la impunidad” en nuestro
país. Canciller y Fiscal hablando de impunidad ¡Por favor!
Cinismo mayor no puede encontrarse. ¿Cómo se les ocurre
hablar de impunidad en un país en el que el 90% de los crímenes no son
perseguidos ni sancionados por fiscales y
tribunales? ¿No es acaso la Fiscalía General de la República uno de los
factores fundamentales de este desbarajuste de impunidad nacional?
Y esto sin hablar de la inacción en materia de corrupción y
de las violaciones a los derechos humanos de los detenidos en las cárceles,
torturados, entre otros lugares, en un recinto de horror que se está haciendo
famoso: La Tumba.
La señora Delcy Rodriguez, en declaraciones que dio
conjuntamente con la Fiscal General, señala que hay varias causas que se siguen
en el país que supuestamente no han conseguido respuesta de autoridades
norteamericanas.
Y yo me pregunto cuántas miles de causas penales en nuestro
país no han recibido respuestas de la Fiscalía o de los tribunales que el
gobierno maneja a su antojo.
Según los estudiosos del tema, alrededor del 90% de los
homicidios no tiene castigo. Hace un año, de 8.813 denuncias de violación de
los derechos humanos que fueron consignadas en la Fiscalía General, el 97% fue
archivado. De 8.813 denuncias de violación de derechos humanos que recibió la
fiscalía venezolana, el 97% fue archivado. De los 30.000 casos de diversos
delitos que recibió la Fiscalía, sólo el 7% finalizó en acusaciones, según
cifras oficiales.
Según Provea, en el primer semestre de 2014, 110 presos
resultaron heridos y 150 asesinados en las cárceles del país. Desde 1999 han
muerto 6.313 personas y 16. 318 han resultado heridas allí.
Desde el mes de febrero de 2014 hasta la fecha, afirma el
Foro Penal, han sido detenidas arbitrariamente 3.414, entre ellas, 287 menores
de edad, 80% estudiantes. Siguen detenidas 62 de ellas en cárceles de horror.
Se reportan 157 casos de tortura, tratos crueles, degradantes e inhumanos.
Por otro lado, uno se pregunta por qué el juicio sobre el
asesinato a mansalva de Basil Da Costa en febrero del año pasado, aun no ha
comenzado.
¿Y qué nos dicen del extraño asesinato del ex gobernador
Jesús Aguilarte? ¿Y el del fiscal
Anderson?
Ante este cuadro nacional espeluznante, vienen ahora de
manera desfachatada a hablarnos de impunidad unas funcionarias cuyas ejecutorias
públicas no les acreditan autoridad moral alguna para reclamar a nadie dentro y
fuera del país absolutamente nada.
Antes de reclamar a otros que actúen de una forma
determinada, deberían empezar por cumplir en Venezuela con su deber.
Pero eso sería esperar un imposible de quienes tienen la maña
de atribuir a terceros los males que padecemos y que ellos mismos han creado
y/o ampliado. De quienes perversamente culpan de sus errores a las propias víctimas,
y hasta llegan a destruir los bienes públicos a cargo de gobernantes de
oposición, para que no puedan prestar sus servicios a la comunidad, como es el
caso reciente de la Alcaldía de Sucre, en el que destruyeron camiones de
basura, cuyos antecedentes han sido denunciados, por cierto, decenas de veces
ante la Fiscalía y ésta ni se inmuta.
¿Nos hablan de impunidad ahora?
Impunidad es la que ha caracterizado a 16 años de desgobierno
empobrecedor y de tolerado, cuando no, aupado envalentonamiento de la
delincuencia en todas sus facetas.
EMILIO NOUEL V.
@ENouelV
No hay comentarios:
Publicar un comentario